Imagina despertar cada mañana con la brisa marina y el suave rumor de las palmeras. Este no es solo un departamento, es tu pasaporte a la vida que siempre soñaste en Acapulco. Sus 250 m² se despliegan para recibirte con la frescura que el clima exige: una amplia estancia bañada en luz, con tres aires acondicionados y ventiladores de techo que te invitan a relajarte. La cocina equipada es el corazón de la casa, lista para crear memorias culinarias, mientras que el cuarto de lavado independiente mantiene la practicidad.
La vida se extiende más allá de las paredes gracias a sus 49 m² de terrazas. La principal, techada, se funde con la sala, creando un espacio perfecto para desayunos prolongados o cenas al aire libre con la mejor compañía. En la terraza superior, visualiza amaneceres, o pasa tardes de lectura y siestas a la sombra, conectando directamente con dos de las tres recámaras del departamento, cada una un refugio de paz con aire acondicionado. Pero lo que realmente lo hace único es la posibilidad de construir una alberca privada y, sobre todo, la membresía exclusiva al Club de Mar. Aquí, la vida se enriquece con acceso a muelles, restaurantes, gimnasio y albercas con vistas espectaculares.
Este es el espacio que te invita a vivir, a sentir, a conectar con el mar.
Agenda una visita y descubre tu próximo hogar. La vida en Acapulco te espera.
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